Cuando las mamas en la mujer son grandes y pesadas puede manifestarse disconfort, disminución de la autoestima, inseguridad social y dificultad para realizar actividad física.
El exceso de volumen en las mamas – Hipertrofia Mamaria o Gigantomastia – se debe al desarrollo excesivo de la Glándula Mamaria y del Tejido Adiposo (grasa) de su interior y suelen estar caidas -Ptosis- por lo cual este la Reducción de Mamas suele acompañarse de Levantamiento (Mastopexia).
Son habituales síntomas como dolor de espalda, dolor de cuello, dolor en las mamas, huellas en los hombros por el bretel del corpiño e irritaciones de la piel debajo de la mama que alteran la vida diaria.
La Reducción Mamaria se presenta como la solución a estos problemas ya que es un Procedimiento Quirúrgico que se realiza para disminuir el tamaño mediante la extirpación de grasa, tejido mamario y piel, haciéndolas más pequeñas y firmes cubriendo dos tipos de necesidades, una de tipo estético, ya que los pechos mejoran su aspecto con la reducción, y otra por motivos de salud, aliviando las molestias de la espalda, al ser liberada del peso excesivo. También se puede reducir el tamaño de la areola.
La Reducción de las Mamas es una intervención especialmente gratificante porque inmediatamente después de la Cirugía se ven y sienten sus beneficios.
Las cicatrices son pequeñas y en una zona poco visible: de la areola en vertical hasta el surco submamario, a veces también una en perpendicular siguiendo la forma del surco las que acaban siendo con el tiempo, prácticamente invisibles.
Gracias a la Reducción de Mamas se siente comodidad, mejora la postura y cede el dolor por el peso. Esta Cirugía Estética aporta alivio físico y excelentes resultados estéticos.
La Cirugía de Reducción Mamaria se realiza bajo Anestesia General, o Local Asistida. Dura alrededor de dos horas dependiendo del paciente y la técnica que se use.
Luego de la cirugía no se deben realizar movimientos bruscos. Al mes pueden retomarse las actividades físicas.